LA EMPRESA PERDONA UN MOMENTO DE LOCURA
UNA OBRA TEATRAL REFRESCANTE Y CRÍTICA
Pablo Aburto Valladares*
melisma100@yahoo.es
El Señor Núñez, emigrante del campo a la ciudad, se emplea en una fábrica que inicia operaciones con quince obreros. La empresa en veinte años crece y se inserta en el capitalismo salvaje, Núñez el personaje principal que es un obrero eficiente y ejemplar, mientras capacita a un joven obrero sufre una crisis de histeria paranoise y daña a martillazos la troqueladora que había cortado los dedos al joven trabajador. El empleado enloquecido es llevado a la psicóloga de la empresa para investigar las causas del raro comportamiento de su empleado estrella.
El tema se desarrolla en los siguientes diálogos de encuentros entre el obrero, personaje interpretado por el actor dramático René Medina Chávez y el personaje psicóloga, interpretado por la actriz Alicia Pilarte del grupo de Teatro Justo Rufino Garay. La obra es de Rodolfo Santana y la dirige Lucero Millan. Destacan en la puesta en escena, la creativa y refrescante integración de elementos técnicos del cine al teatro. La sombra del personaje obrero que se integra a los ochocientos obreros en ilustrativo movimiento proyectados a la pantalla; los efectos de sonidos y los violentos movimientos de engranajes de máquina proyectados en pantalla se dan en perfecta unión con los gestos dramáticos del personaje principal. Las luces fijas con sus cambios tienen un bonito y funcional diseño para la escena.
A nivel de conflicto, el personaje protagónico no está conforme con su calidad de vida después de trabajar veinte años en la empresa. Es analfabeto político, sin embargo recuerda de su hijo Antonio fallecido, ejemplar estudiante de economía, sus ideas sobre el capital. En la empresa los obreros hablan de sabotaje, el Señor Mendoza y el Consejo Directivo deciden el futuro del obrero. La psicóloga de la empresa como terapia obliga al Señor Núñez a apalear una réplica en muñeco del Señor Mendoza representante del sistema capitalista en la empresa. La Junta Directiva le da una medalla de honor, le aumenta el salario y lo manda de vacaciones a cambio que en la celebración del XXIII aniversario de la empresa, el obrero Núñez dirija un discurso a los presentes.
La obra refresca con creatividad la dirección escénica; su temática es muy actual, de visión futurista y muy reflexiva: Nicaragua pasada la década de guerra civil de los 80, está entrando en la nueva era… de apalear muñecos? Qué tan salvaje es el capital de una empresa que da a un obrero ejemplar medalla de honor, aumento salarial y vacaciones? O será más civilizado esperar los muertos y heridos que deja una huelga prolongada en un país empobrecido? ¿Será efectiva la terapia que emplea la psicóloga de la empresa en la que trabaja el obrero Núñez?... ¿Cuántos (as) estarán apaleando el muñeco?
La empresa perdona un momento de locura, se presentó en la Sala Justo Rufino Garay el pasado 17 de junio y a petición del público se presentará el próximo sábado 24 de junio.
Managua, 20 de junio de 2006
* Miembro de la Red de Profesionales del Teatro en Nicaragua y de la Red de Periodistas Culturales de Centroamérica (Perioistmo Cultural)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario